09 agosto, 2007


Ya me estoy desesperando. Claro que no es la desesperación aterradora que me dio en noviembre pasado, cuando de tanta vida de puta nómade, ya estaba harta de no estar en mi casa y deseaba retomar mi vida cotidiana (vaya excentricidad). Esta desesperación es relativamente más pacífica, ejercito manejarla, no me ha sido tan cruel porque me han acompañado, pero por ahí florecen esas ganas de tomarme un trago, de drogarme (sobre todo eso), de bailar, de ver gente (sobre todo hombres), de volver a hablar las tonterías de siempre con mis amigos, de usar mi ropa y todas esas frivolidades, de ver a la Lulux, de salir con la Bucéfala, en fin, mis cosas. Pero no, se me ocurre "ahorrar" (entre comillas porque aunque me pese, cada minuto que pasa pierdo)y tomar este curso de conducir tan aburrido (pero necesario como todas las cosas aburridas), lo que significa que quedo amarrada a este pueblo fantasma hasta nuevo aviso, que vendría a ser algo así como fin de mes. Fastidio completo, a mi que me gusta tanto estar ajena a las responsabilidades, los horarios (sobre todo si eso implica levantarse al alba), toda esta mierda burocrática.Todo sea por el sueño de convertirme en conductora de retroescavadoras, fin para el cual aún me resta un largo trecho pero seamos optimistas y pensemos en este monótono cursillo como el comienzo de la senda del emprendimiento, miren que después, cuando sea una avesada conductora de estas maquinitas en Europe, me voy a comprar una y de ahí a tener una transnacional de retroescavadoras un paso...esto es sólo el comienzo.

Lo peor de todo, a parte de estos pies de mierda que tienden al congelamiento y del aliento del instructor, es que en este pueblo culiado no existen minos para coger. Sé que ya me he quejado al respecto, pero es que no se imaginan la verdad que hay en mis afirmaciones.Nothing, rien du tout. Y una que aún es joven (aunque eso, claro,depende de la perspectiva, para mi hermana soy lo suficientemente vieja) y caliente (sobretodo después de una desenfrenada jornada de sexo virtual con JJ), se anda cortando las venas. Pero en fin, resignación es la consigna, aunque la deteste, vamos a practicarla un poco. Machos porteños, afírmense los calzoncillos esta primavera, que esta mujerzuela va a por ustedes, coño...

1 Comments:

Blogger Marta said...

Hola Cocó (de todos los nombres por los que te autodenominas, este me parece el mejor con diferencia), pero niña, niña... ¿Estás en un sitio donde no se puede coger porque no hay hombres? Eso es el puritito infierno entonces. ¡Sal de ahí ya! ¿Te dijeron alguna vez que esos autocastigos no-follatorios son malísimos para la salud?
Ahora en serio: me gusta tu blog, tu strip tease verbal, tu manera de meterte en la boca del lobo y contar lo que te sale del horto (¿se escribe así? Aquí en España no usamos esa palabras, así que no estoy segura si es con hache). Eres una deslenguada y una desvergonzada. Me encanta ;)

9:27 a.m.  

Publicar un comentario

<< Home